viernes, 5 de junio de 2009

Otros usos de los Radioisotopos

La Medicina Nuclear usa con fines de diagnóstico o de terapia la emisión radioactiva de un número bastante limitado de sustancias. No es una disciplina novedosa (nació hacia 1920), pero sí innovadora, porque avanza mucho.
En un tiempo la Medicina Nuclear adelantó sobre la radioquímica, que fue descubriendo elementos radioactivos naturales, así como produciendo otros, artificiales, desconocidos en la naturaleza, como el Tecnecio. Se conocen unos 3000 nucleídos, o especies nucleares diferentes, de los cuales 275 son estables (no emiten radiación ni se transforman en otras especies). De los isótopos inestables, los que sí emiten radiación y al hacerlo se transforman en otros nucleidos, hay 40 de origen natural. El resto son nucleidos producidas por el hombre. Incluso se ha completado y prolongado la Tabla Periódica de los elementos en 28 elementos artificiales, que no tienen isótopos estables. Uno de ellos es el Tecnecio; otro, el Plutonio. De los 92 elementos tradicionales se ha avanzado hasta el número atómico 118, que ni siquiera tiene nombre y una vida media de sólo pocos microsegundos.




Radiofarmacología
Estamos naturalmente sometidos a una irradiación constante de origen geológico y cósmico. Los organismos absorben los distintos tipos de radiación ionizante nuclear (alfa, beta y gamma) con consecuencias que dependen de la intensidad y duración de la irradiación. Esto condujo a dos tipos de aplicaciones en medicina: el diagnóstico mediante trazadores y el uso de las radiaciones para fines terapéuticos.
Hay elementos que forman compuestos que tienen una afinidad química natural por determinados órganos o tejidos: el yodo (radioactivo o no), se absorbe mucho más en la tiroides que en cualquier otra parte del cuerpo. Lo mismo puede decirse del tecnecio respecto de los huesos, o del Talio por el corazón.
Esto le da un potencial diagnóstico a los compuestos que contienen radioisótopos de estos elementos, como el Iodo 131 o el Tecnecio 99, ya que con su emisión radioactiva pueden señalar un tumor o dar indicios sobre el funcionamiento cardíaco. Un déficit o un exceso de captación mostrarán estados metabólicos ligados a disfunciones o a tumoración.
Otros radioisótopos son menos usados, pero el principio es el mismo. Si el radioisótopo está “marcando” una molécula fácil de ser captada por su blanco, el estudio de la radiación emitida puede mostrar no sólo la morfología del órgano o tejido a estudiar, sino una medida de su actividad metabólica.

La vida media de un radiosótopo es el tiempo que tarda la mitad de una masa inicial en desintegrarse, emitir radiación y transformarse en otra especie radioquímica. Los radioisótopos de corta vida media y débil emisión radioactiva son ideales para diagnóstico, porque suponen una dosis mínima de absorción radioactiva colateral para el paciente – incluso inferior a la de una radiografía común de rayos X.

Los radiosótopos más usados
Como se reiteró varias veces, si en diagnóstico lo importante es limitar la dosis de radiación, en materia de intervención, en cambio, lo importante es maximizarla selectivamente para los tejidos dañinos o dañados. Esto da origen a dos tipos de radioisótopos, y a intervenciones de tipo muy variado.
Muchos de los radioisótopos de mayor uso se fabrican en reactores nucleares, (donde una serie de sustancias precursoras, o “blancos”, se someten a transmutación por bombardeo de neutrones). Pero también hay radioisótopos fabricados por bombardeo de sustancias precursoras no con neutrones sino con partículas producidas por ciclotrones. Los radioisótopos de corta vida media (pocos minutos) usados para diagnóstico mediante la Tomografía por Emisión de Positrones (PET) se producen en ciclotrones instalados junto al tomógrafo mismo.
La irradiación de un tumor se puede hacer de varias formas. Nosotros producimos equipos de Telecobaltoterapia, donde el tumor se irradia desde fuera del cuerpo, colimando estrechamente el haz de rayos gamma para no dañar tejidos sanos. Hay dos alternativas: el uso de Aceleradores Lineales (fabricados por nuestra representada Elekta) que se usa del mismo modo que la telecobaltoterapia. Y la braquiterapia, tratamiento en que se implantan pequeñas fuentes radiactivas en el tumor mismo; para este tratamiento se suele usar agujas de Iridio 192.

PARA MAS INFORMACION, ACA HAY UN ARTICULO DE DIARIO MUY INTERESANTE:
http://www.elcomercio.com.pe/edicionimpresa/Html/2008-09-18/el-peru-produce-radioisotopos-uso-medicinal.html

Algunas preguntas para pensar!

  1. ¿Por qué está la sociedad tan asustada respecto a la energía nuclear?
  2. ¿Es correcto continuar con el uso de esta energía, o es conveniente buscar una nueva?
  3. En el mundo hay muchas centrales nucleares. ¿Creen que en comparación al resto, la Argentina está tecnológicamente desarrollada?

jueves, 4 de junio de 2009

Palabras mayores...

“No sé con qué armas se luchará en la tercera Guerra Mundial, pero sí sé con cuáles lo harán en la cuarta Guerra Mundial: Palos y piedras.” - Albert Einstein

Sabia palabras...

"La energía nuclear es la única opción viable para salvar a la Humanidad del cambio climático"- James Lovelock

Proyecto Manhattan

Proyecto Manhattan

El día 2 de agosto de 1939, Albert Einstein, en nombre de varios científicos, le escribe una carta al Presidente Roosevelt instándolo a apoyar al grupo de científicos que investigan la utilización de la energía atómica en el Proyecto Manhattan. Las investigaciones nucleares en el mundo se iniciaron en 1905, y en 1938 el científico alemán Otto Hahn descubrió la fisión atómica. Inmediatamente la comunidad científica internacional comenzó la carrera que tenía como meta fabricar un reactor atómico para aprovechar la energía en la industria.
El proyecto no tenía gran apoyo del gobierno, que lo ve como un estudio esotérico de teorías que sólo los científicos entienden. Sin embargo la carta de Einstein, que refleja el sentir de los científicos, en el sentido que es necesario desarrollar una bomba atómica antes que Alemania consiga hacerla primero, alerta al gobierno de Roosevelt. En 1941, el ataque a Pearl Harbor aumentó el temor entre los Aliados, pues en ese momento parecía que nada podía detener a las fuerzas del Eje, cuyos ejércitos obtenían victoria tras victoria en todos los frentes.
Atendiendo la sugerencia de los científicos, el Presidente Roosevelt autorizó la creación del Proyecto S-1 dentro del proyecto Manhattan, que inicialmente sería del tipo comercial. Fue dirigido por Arthur H Compton. En setiembre de 1942, Roosevelt le da el impulso al proyecto en la dirección correcta, designando un mando militar en la persona del Coronel Leslie Groves. Inmediatamente, Groves reorganizó el equipo de científicos, ingenieros y técnicos, dotándolos de los equipos necesarios para desarrollar su trabajo.
En el primer día a cargo de la dirección del proyecto, Groves ordenó 1250 toneladas de uranio del Congo Belga que se encontraban almacenados en Staten Island.
Groves puso la conducción administrativa del proyecto en manos de corporaciones como la Dupont y Kellogs Corporation y puso en marcha la construcción de una planta para producir material fisible. En octubre de 1942, Groves nombró al científico Julius Oppenheimeridad para dirigir a un grupo de científicos europeos inmigrantes, que se dedicarían a tiempo completo a la fabricación de la bomba atómica y decidieron instalar los laboratorios en el desierto de Los Álamos en el estado de Nuevo México. Ese año, Enrico Fermi logró construir un reactor atómico experimental, llamado Chicago Pile 1, con lo que EEUU daba un importantísimo paso en la carrera nuclear.

En enero de 1943 Groves adquirió, por 52 mil dólares, las facilidades de Hanford Engineer Works, en Oak Ridge, que se convertiría en uno de los mayores laboratorios usados en el desarrollo de la bomba atómica. En marzo Los Álamos comenzó a funcionar. Durante lo que restó del año, Hanford produjo plutonio, Oak Ridge uranio enriquecido y un reactor experimental para producir plutonio, por su parte Los Álamos estaba diseñando las armas. Pero, pasado el medio año, el enriquecimiento de uranio en gran escala fracasó en Oak Ridge y fue necesaria una completa revisión de todo el proyecto.
En 1944 los trabajos continuaron, aunque con no pocos problemas que obligaron a revisiones continuas y modificaciones del proyecto. La situación continuó y en setiembre de 1944, el Proyecto Manhattan comenzó a estancarse por multitud de problemas que parecían insolubles.
Pero a fines de 1944, las cosas fueron encarrilándose en el Proyecto Manhattan. La producción de uranio enriquecido comenzó a incrementarse y las primeras pruebas de una implosión dieron resultados satisfactorios. La producción de plutonio también alcanzó los niveles deseados y el equipo que diseñaba el arma, finalmente tenía modelos factibles.
A comienzos de 1945, el Proyecto Manhattan estaba cerca a alcanzar su meta. La bomba de uranio tenía el éxito prácticamente asegurado y la bomba de plutonio estaba cerca de ser terminada, aunque no cumpliría con la fecha de entrega estimada. En esos momentos, ya el general Groves no se preocupaba por el éxito del proyecto. Su preocupación era, que la guerra terminara antes que la bomba estuviera lista para ser lanzada. A fines de enero de 1945, la producción de uranio enriquecido aumentó, estimándose que alcanzaría los 40 Kg. en julio.
En marzo la etapa de desarrollo de la primera bomba, con nombre de código Trinity, estaba llegando a su fin y en abril comenzaron a seleccionarse 17 lugares para la explosión de la bomba. Durante los meses de mayo, junio y julio de 1945, se hicieron las primeras pruebas reales y la lista de posibles blancos fue depurada. Mientras tanto el Grupo 509 llegaba a su base en Tinian, Islas Marianas. El 16 de julio de 1945, Trinity, la primera bomba de prueba fue explotada exitosamente en el desierto de Los Álamos. El destino de los habitantes de Hiroshima y Nagasaki estaba decidido.

Una Info para Pensar


Info de un Grande !!! Palabras Mayores
http://dipc.ehu.es/digitalak/orriak/castellano/politica.html

Una Info muy Interesante
http://www.google.com.ar/archivesearch?hl=es&q=proyecto+manhattan&um=1&ie=UTF-8&scoring=t&ei=iwUpSqv0O5GNtgf_iqzKCA&sa=X&oi=timeline_result&ct=title&resnum=11

Encuesta

La energia nuclear y la salud

La medicina nuclear es una rama de la medicina que emplea tencnicas seguras y costosas para obtener informacion funcional y atomica.
Permite detectar alteraciones en el organismo, antes de que las mismas den sintomas, son tratamientos mas efectivos y tempranos y pronosticos frecuentes mas favorables.
La Medicina Nuclear emplea pequeńísimas cantidades de radiofármacos para diagnosticar y tratar enfermedades.
Los radiofarmacos son sustancias que se inyectan para probocar un efecto en los organos, huesos o tejidos.
La cantidad de radiación a la que se está expuesto en las exploraciones de Medicina Nuclear es comparable y frecuentemente inferior a la recibida en exploraciones radiológicas de rutina.
No es invasiva porque a diferencia de otras técnicas de diagnóstico que exigen cirugía o introducción de aparatos en el cuerpo, la medicina nuclear en la mayoría de los casos basta con un inyección endovenosa. Otras formas de administrar los radiofármacos es por vía oral, inhalatoria o intracavitaria.
Hoy en día, la Medicina Nuclear ofrece procedimientos útiles en todas las especialidades de la medicina, desde cardiología a neuropsiquiatría. Existen casi 100 evaluaciones distintas de Medicina Nuclear y no hay órgano que no pueda ser explorado mediante esta especialidad de la medicina moderna.